viernes, 25 de enero de 2008

¿Vamos a ser tan tontos de asumir el discurso falaz de la derecha sobre la economía?

Hace unos días, El País publicaba un reportaje de balance de la legislatura que acaba de terminar, preguntando a los portavoces parlamentarios por lo que les había parecido más sobresaliente de la misma. Me gustó especialmente la respuesta de Diego López Garrido, al señalar que lo mejor del Gobierno socialista en estos cuatro años era su gestión económica. Es verdad, coincido plenamente con ello. Lo digo porque en los últimos días algunos datos (como los del desempleo o la inflación), junto al ambiente creado por la crisis financiera provocada en los Estados Unidos y el aumento del precio del barril de petróleo, pueden empequeñecer los buenos resultados obtenidos de cara a la ciudadanía y, sobre todo, hacer que los socialistas nos repleguemos sobre nosotros mismos a la hora de explicarlos. Por mi parte, pienso hacer lo contrario: no voy a negar que la EPA indica que hay casi 120.000 parados más que en estas mismas fechas de 2007 -ahí está el lógico aterrizaje de lo inmobilario-, pero al tiempo vocearé que se han creado más de 3.000.000 de puestos de trabajo en el cuatrienio; no voy a negar que la inflación ha subido, pero explicaré simultáneamente que ha sido por causas esencialmente exógenas, y no olvidaré repetir que pensiones y prestaciones sociales -ese salario indirecto tan directo- han crecido sensiblemente. O sea, considero que en estas elecciones, como en todas, la economía es clave porque afecta a la vida cotidiana de la ciudadanía, y que es además bueno que así sea pues el balance del gobierno Zapatero es netamente positivo. ¿Vamos a ser tan tontos de asumir el discurso falaz de la derecha sobre la economía cuando nosotros podemos presentar un notable alto en cantidad y calidad, es decir, en crecimiento, superávit, empleo y prestaciones sociales, esto es, en viabilidad, igualdad y solidaridad? Estoy seguro de que no.

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola, Carlos. Saludos desde la Agrupación de Chamartín.

Bajo mi punto de vista, no es que nosotros vayamos a asumir el falaz y oportunista discurso de la derecha española, que ya ha dado múltiples muestras de su carencia de ideas y de la volatilidad de sus movimientos. Como tú dices, es evidente que la gestión económica ha sido, en balance, netamente positiva, a pesar de la crisis actual. Pero... el grueso de la población, el votante medio... ¿Lo ve así? ¿Se molesta en realizar ese análisis?

Tristemente, no. Un amigo mío me lo decía hace semanas y yo le replicaba que no era posible que, con tantos datos a favor nuestro (reducción del paro, aumento de la bolsa de la SS, de las pensiones, del salario mínimo), la gente se pudiera quedar con unos datos contractuales que no representan el balance de cuatro años de legislatura. Pero veo que no, que hay mucha gente que deglutina ciegamente lo que les echan desde los micrófonos de Génova sin cuestionarse nada más. ¿Cuantos se paran a pensar en que la subida de la leche, del pan, de la carne, se debe a una subidad internacional del precio de los cereales? Casi nadie, y ése es el problema. Que hay muchos españoles sensibles a esos mensajes tan falsos como fáciles y alarmistas, lo que también quedó probado tras la el uso de la política antiterrorista (incluyendo el 11M)por el PP. QUe me expiquen por qué, tras la sentencia, no levamos 10 puntos de ventaja al PP. Porque eso sería lo normal...