El ímpetu europeísta de la sociedad civil española
Tras poco más de un mes de trabajo como Embajador en Misión Especial he podido constatar -ese es el verbo exacto, porque ya lo había comprobado y vivido en directo como eurodiputado pegado a la gente- algo que me satisface: el ímpetu europeísta de la sociedad civil española, empeñada en dar a conocer la UE de forma crítica y reflexiva, conformando ciudadanía europea.
Me he reunido ya con decenas de entidades; he estudiado cientos de proyectos de actividad de la sociedad civil; he participado en numerosos actos de toda índole; he preparado propuestas de calado que tienen que ver con los símbolos de la Unión, la enseñanza de Europa y el perfil ciudadano del Tratado de Lisboa. Y mi conclusión no puede ser otra que la española es una opinión europeísta viva, que hay que seguir promoviendo por todos los medios de los que la Administración dispone.
Con este mimbre ciudadano es imprescindible contar para el éxito de la Presidencia Española de la UE y, después de ella, para que no decaiga. Así lo haremos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario