Socialistas y neoliberales nos confrontamos en el Parlamento Europeo sobre el comercio de servicios: obviamente, no somos iguales

Ayer por la noche debatimos en el pleno del Parlamento Europeo el Informe sobre el comercio de servicios preparado por el diputado conservador británico Syed Kamall. Hoy lo votaremos.

Pocas veces la diferencia entre la derecha y la izquierda queda nítidamente subrayada en la Eurocámara, apremiados continuamente por ajustar grandes mayorías en pro del avance del proceso de construcción europea.

Pero el Informe Kamall va a ser una de esas ocasiones en las que una concepción socialista y una neoliberal se confrontan democráticamente sin concesiones.

Nosotros, los socialistas, estamos a favor de promover el comercio de servicios como una forma de generar crecimiento económico y desarrollo.

Pero no compartimos la visión de que los servicios públicos y/o de interés general puedan quedar en manos de empresas privadas, sometidos sin más a las puras, duras y en muchos casos ineficaces reglas del mercado.

Ello socavaría la fuerza de lo público y podría desembocar en monopolios u oligolios privados que ofrecieran servicios públicos o de interés general de forma no accesible universalmente, a precios no asequibles y sin normas de calidad suficientes.

Una situación así tendría consecuencias lamentables para la población de los países en vías de desarrollo y únicamente ayudaría al lucro privado.

Y a eso decimos NO.

Por eso hemos enmendado profundamente el Informe Kamall, por mucho que el comisario Peter Mandelson lo aplauda a dos manos, algo sorprendente a la vista de su pertenencia al laborismo británico, cuyos eurodiputados lo han rechazado en su versión original como lo hemos hecho el resto de socialistas europeos.

La buena noticia es que finalmente hemos conseguido introducir nuestras enmiendas favorables a garantizar los criterios básicos antes señalados en el Informe, reequilibrándolo en temas esenciales. Así que, esta vez, hemos ganado en favor de la ciudadanía y del desarrollo sostenible.
Os dejo mi intervención