Por la libre determinación del pueblo saharaui

Los Reyes de España están visitando Argel. Las palabras del Jefe del Estado han sido, como titula El País en su portada de hoy, inequívocas: "EL REY DEFIENDE EN ARGELIA LA LIBRE DETERMINACIÓN DEL SÁHARA".

Por su parte, el Congreso votó ayer unánimemente, empezando por el Grupo Socialista, una Proposicíón No de Ley en la que insta al Gobierno a que "promueva iniciativas que contribuyan a conseguir un acuerdo consensuado entre las partes, que respete la legalidad internacional y el legítimo derecho del pueblo saharaui a la libre determinación de acuerdo con la Carta de las Naciones Unidas y las resoluciones del Consejo de Seguridad", pide al Ejecutivo que "se abstenga de promover o apoyar toda medida que debilite sus posibilidades de desempeñar un papel equitativo" y demande a Marruecos "poner en libertad a los presos saharauis encarcelados por el ejercicio de sus derechos".

Nuestro país tiene una responsabilidad histórica, internacional, política y solidaria con el pueblo saharaui. A España, por ello y por otro cúmulo lógico de razones, le interesa una solución justa y duradera del conflicto, basada en la legalidad y la libre determinación del pueblo saharaui, que abra las puertas a la construcción de un Magreb en paz, cooperación y desarrollo.

Tenemos que conseguir que la UE juegue también, activamente, en esa dirección, porque el conflicto del Sáhara afecta al Mediterráneo en su conjunto, si tenemos en cuenta que el Magreb es una de sus dos mitades en la ribera sur de la región.

Como miembro del Intergrupo Paz para el Pueblo Saharaui del Parlamento Europeo, como integrante de la Delegación Ad Hoc para el Sáhara Occidental de la Eurocámara, como Portavoz socialista europeo en la Asamblea Parlamentaria Euromediterránea, hoy estoy satisfecho.