Ruiz-Gallardón, de nuevo en la picota por el soterramiento de la M-30. El PSOE llevaba razón.

Los socialistas madrileños llevábamos razón cuando denunciamos -en el Parlamento Europeo, a través de la primera pregunta que se hizo sobre el tema, y en el Ayuntamiento de Madrid- que el soterramiento de la M-30 (por mucha vía urbana que fuera la misma y por mucho fraccionamiento del proyecto que se pusiera encima de la mesa), necesitaba obligatoriamente una declaración previa de impacto ambiental. Así lo consideró la Comisión Europea al iniciar en abril de 2006 un Procedimiento de Infracción y así lo acaba de establecer como criterio general el Tribunal de Justicia de la UE al responder a una consulta prejudicial planteada por el Juzgado 22 de Madrid ante una denuncia de Ecologistas en Acción. Ruiz-Gallardón ha vuelto a quedar como lo que es: un mal gestor que incumple la ley europea en este caso de forma flagrante, que es también la española. Proectos futuros ya no podrán escaparse de la ley que protege el medio ambiente y nuestros derechos frente a arbitrariedades y desmanes de administraciones como las del PP en el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid. Este es el enlace de los teletipos de Europa Press con la noticia y con mis declaraciones.